Pages

Causas y consecuencias de la monotonía en las parejas


Fuente: Listindiario

Si la monotonía parece haber arropado tu relación de pareja y está afectando la estabilidad matrimonial, no te aflijas, el problema es muy común. “La cotidianidad es algo normal en la pareja, no se puede vivir en aventura todo el tiempo”, asegura la psicóloga, sexóloga y terapeuta Ana Simó, del Centro Vida y Familia Ana Simó.

Lo mismo manifiesta la también psicóloga, especialista en terapia sexual y de pareja Margaret Almánzar.

“Es una queja frecuente en consulta, todas las parejas hablan de monotonía y de aburrimiento, sea porque siempre hacen lo mismo, porque no tienen actividad como pareja, porque siempre incluyen a los hijos o porque no tienen tiempo para compartir juntos”, expresa Almánzar.

La dificultad está, según detalla Almánzar, en que la monotonía puede pasar también a afectar el plano sexual.

“La monotonía fuera y dentro de la cama están relacionadas”, dice la experta, y añade que muchas veces las causas incluyen diferencias entre las expectativas y la realidad de la relación e incluso de comparaciones con el tiempo de noviazgo o relaciones previas.

Lo que acarrea
El aburrimiento en la pareja no tiene por qué significar la ruptura definitiva. Sin embargo, como comenta Heidy Camilo, psicóloga, especialista en terapia sexual, de pareja y violencia intrafamiliar, puede convertirse en la justificación para la infidelidad.

“Muchos hombres entran en ese sistema de creencia erróneo de que son infieles porque sus esposas los tienen aburridos, porque siempre hacen lo mismo y entonces ellos tienen una amante por eso, esa es la justificación mala que dan”, expresa.

La monotonía puede acarrear la infidelidad pero también disfunciones. 

Ramón Emilio Almánzar, psicólogo y especialista en terapia familiar, sexual y de parejas, dice que acabar con la rutina depende mucho de ser capaces de hablar sin tabúes sobre los gustos mutuos entre las sábanas.

Fidel Valera, médico especialista en terapia sexual y de parejas, corrobora con él.

“Hay personas que creen que el otro es adivino y piensan que por el solo hecho de que se quieren y han decidido estar juntos ya el otro tiene que saber en todo momento lo que la pareja desea, piensa y le gusta, si no hasta creen que esa persona no les quiere”, indica.

La monotonía forma parte de la vida en pareja
“Siento que nos han metido un cuco con la monotonía, nos han hecho creer que si caemos en ella se fastidió el matrimonio y no es así”, asegura la psicóloga, sexóloga y terapeuta Ana Simó. Añade que aunque acudir a terapia de pareja puede ayudar, muchas veces el tema es personal y hay que trabajar también de forma individual.

“Está la clásica queja de ‘estoy aburrido o aburrida’, pero cuando lo trabajamos en terapia y preguntamos por qué vemos que no es un tema de la pareja, sino de la persona, de que el proyecto en común que se plantearon al inicio de la relación ya no le llena, se esté cumpliendo o no ese proyecto”, explica la experta en la conducta.

Margaret Almánzar, psicóloga, especialista en terapia sexual y de pareja, añade que a veces se comienza una relación con ciertas expectativas de cómo debe actuar el otro. “Cuando nos confrontamos con la realidad ya no es atractiva, no nos motiva, estamos haciendo lo mismo y eso no es novedad, no genera motivación, interés o emociones”.

En la cama
Una rutina prolongada puede causar una crisis en la pareja y llevar a disfunciones sexuales, como falta de deseo o una pérdida total de interés. En el plano sexual “hay que comunicarse y ser capaz de detectar de qué acciones deriva el placer sexual en la pareja, si no se sabe qué excita al otro, no se va a conseguir la plenitud ni se romperá la monotonía sexual”, dice Ramón Emilio Almánzar, psicólogo y especialista en terapia familiar, sexual y de parejas.

Si no se llega al entendimiento en este aspecto, la monotonía puede convertirse en una excusa para la infidelidad, como argumenta la psicóloga, especialista en terapia sexual, de pareja y violencia intrafamiliar Heidy Camilo.

“Muchos hombres justifican el tener una amante por el aburrimiento que viven en su relación matrimonial. También sucede con muchos casos de infidelidad femenina que se están dando donde la mujer argumenta que el hombre no las atiende como esperan. Todo esto es un mito, pues las parejas que viven su cotidianidad no tienen que verla como amenaza”, asegura.

Más que juguetes
Las tiendas de juguetes sexuales hacen su agosto con la rutina de las parejas. “Abres el closet y salen todo tipo de artefactos. Muchas mujeres se quejan de que han comprado de todo y el hombre ni caso les hace, y es que ese no es el tema”, asegura Ramón Emilio Almánzar.

El tema es “que en el matrimonio hay que invertir, hay sacrificios que hay que hacer, hay un compromiso que llevar, hay que dedicarle tiempo, pero deben ser los dos”, indica Ana Simó. Advierte que suelen llegar a terapia personas con una disfunción sexual pero la raíz es un tema de la relación.

Según la especialista, la intimidad es algo que tensa mucho la relación de pareja y cuando hay problemas “la cama se vuelve una mesa de negociación”, dice Heidy Camilo. “Y la vulva y la sexualidad se convierten en la moneda de cambio en esa mesa”, añade Fidel Valera.

¿Qué hacer?
Ante la monotonía, lo preocupante es que algún miembro de la pareja busque fuera de casa lo que debería cultivar dentro, o cuando uno de los dos se centra en que el otro es el responsable de todo. “Cada quien debe asumir y entender que rebasar cualquier crisis es un tema de dos, pero al final la monotonía es parte de una relación de pareja”, dice Ana Simó.

Cuando se vive en pareja hay que ser capaz de adaptarse a nuevas realidades, es parte del crecimiento de la relación. “Tenemos que entender que tanto la personalidad como la sexualidad y actitudes varían, y si un miembro de la pareja no puede reajustarse a esos cambios que llegan, pues vienen los problemas”, dice Ramón Emilio Almánzar.

El sexólogo añade que todo ser humano que no tenga capacidad de cuestionar sus creencias está condenado al fracaso conyugal y sexual. “Hay ideas preconcebidas de qué debe pasar y cómo, y si no se entiende que las cosas pueden pasar de diferentes formas, entonces siempre habrá dificultades”, advierte.


Relación sin salidas
Margaret Almánzar comenta que otro tema es cuando la pareja identifica las situaciones de conflicto y no se quiere movilizar para resolverlas. “Si no hay compromiso en resolver la situación puede ser que la pareja vaya saltando de terapeuta en terapeuta sin solución”, señala.

Es normal que ciertos niveles de monotonía generen una crisis, pero no hay que pensar en la ruptura. Sin embargo, hay una señal que mide cuándo una relación ya no es salvable: “Cuando la persona ha dejado de admirar a su pareja en todos los aspectos”, dice Ana Simó.


By Edwardilustrado

No comments:

Post a Comment